jueves, 24 de septiembre de 2015

> Enamórate de Enate (y III): la cata


Vinos protagonistas de la cata.


Muy a nuestro pesar no han sido cientos ni miles, pero en los últimos años hemos asistido a numerosas catas, muchas de ellas durante visitas a bodegas, y podemos afirmar sin miedo a equivocarnos que esta cata en Enate ha sido, por muchos motivos, la mejor de todas. Inmejorable el material disponible: copas de excelente calidad, una para cada vino, bolígrafo, papel para tomar notas, fichas de cata, agua mineral, palitos de pan, escupidera individual, etc. Magnífica también la selección de vinos, por calidad, variedades de uva, diferencias en elaboración, etc. Y por supuesto, excelente labor didáctica la de Begoña Roca, sin escatimar detalles técnicos, información que agradecemos profundamente y que en muy contadas ocasiones las bodegas ponen a disposición de sus visitantes. Sin pretender hacer de menos la labor de nadie, existe una diferencia abismal si el responsable de guiar la visita y la cata es una persona con formación en enología. En nuestra humilde opinión habrá un antes y un después a esta cata técnica en Enate.

Detallamos a continuación nuestras notas de cata.



Enate Rosado. Etiqueta obra de Víctor Mira

ENATE ROSADO 2014
Botella bordelesa transparente. Tapón de corcho natural tipo 1+1. Cabernet Sauvignon 100%. Rojo frambuesa, limpio y brillante. Explosiva fase nasal. Fresas y frambuesas silvestres. Muy aromático. Vivaz. Joven. Postgusto casi efervescente (sidral?), merced a un pequeño resto de carbónico todavía presente. Muy agradable en boca, con acidez muy fresca que hace salivar. Gran versatilidad. En palabras de Begoña Roca, un vino con alma de blanco y cuerpo de tinto. 



Enate Chardonnay Barrica 2013. Etiqueta obra de Antonio Saura


ENATE CHARDONNAY BARRICA 2013
Botella borgoñona verde. Chardonnay 100%. 9 meses en barrica de roble. De un precioso color amarillo dorado con menisco del mismo color. Atractiva nariz: piña, avellanas, miel y vainilla. Recuerdos de ebanistería. Impresionante fase gustativa (pan tostado, mantequilla). Muy bien integrado. Al atemperarse aún potencia más sus aromas. Largo, eterno... Para disfrutar.



Enate Reserva 2008. Etiqueta obra de José Manuel Broto


ENATE RESERVA 2008
Botella bordelesa verde. Cabernet Sauvignon 100%. 12 meses en barrica de roble francés. Rojo picota de capa media-alta con ribete rubí. Generosa cantidad de lágrima pigmentada. Fruta roja y especias, sobre todo pimienta negra. Balsámicos. Incienso. Astringencia notable, típica de la Cabernet. Recuerdos de anís y regaliz. Final medio. Tostados limpios. Muy gastronómico.



Enate Merlot 2010. Etiqueta obra de Federic Amat


ENATE MERLOT 2010
Botella bordelesa verde. Merlot 100%. 16 meses de barrica de roble francés. Rojo picota de capa media-alta con ribete granate. Elegante fase nasal, generosa en frutas rojas y negras. Confitura de tomate (?). Trufa natural. Cacao, chocolate y mentolados. Guindas al marrasquino. Astringencia media, muy redondo. Postgusto medio-largo. Plenamente recomendable.



Enate Gewürztraminer 2013

ENATE GEWÜRZTRAMINER 2013
Botella bordelesa verde oscuro de 500ml. Gewürztraminer 100%. 12 meses de barrica de roble francés. Original vino dulce, único en la DO. Somontano, elaborado con uva sobremadurada en el viñedo. Vendimia cuidadosa y prensado suave. No realiza maloláctica. Visualmente de color amarillo dorado. Preciosa fase nasal: miel y vainilla. Muy aromático. Rosas y caramelo. Algo corto en boca. Para repetir una y otra vez.

Una vez concluida la cata, tras un breve paso por la tienda donde pudimos adquirir alguna de las maravillas que Enate produce, tuvimos ocasión de conocer a Ramón Justes, director de Imagen y Comunicación de la bodega, quien nos hizo entrega de un pequeño obsequio por cortesía de Ángel Guerrero, director del Hotel Pedro I de Huesca, cliente nuestro desde hace muchos años. Nuestro más sincero agradecimiento a ambos.

Regresamos a casa sintiéndonos unos privilegiados. Una jornada así no se disfruta con frecuencia. Y sabemos que probablemente nunca borraremos de nuestra memoria aquellas horas que pasamos en Salas Bajas, escuchando las explicaciones, percibiendo los aromas, apreciando las obras de arte que luego se transforman en etiquetas, degustando los vinos, sintiendo, viviendo y enamorándonos de Enate.

Y nosotros cuando nos enamoramos, es para siempre...



Certificados de asistencia. Para enmarcar...


1 comentario:

  1. Yo sigo enamorada, especialmente de su blanco Gewürztraminer 2013.
    Enate Rosado 2014 también me sorprendió muy gratamente.
    Dos vinos muy femeninos para beberlos solos o bien acompañados.

    ResponderEliminar