miércoles, 18 de noviembre de 2015

> De repente, unos extraños...




Vinos protagonistas de la cata



Convocados una vez más en Tomevinos, acudimos hasta su recién ampliada sala de catas para realizar una primera toma de contacto con varios tintos monovarietales elaborados con uvas prácticamente desconocidas por nosotros. En esta ocasión no se trató de una cata a ciegas, ahorrándonos el mal rato pasado en un evento anterior. Por primera vez íbamos a enfrentarnos a cinco vinos (aunque al final fueron seis) elaborados con uvas tan ajenas a nuestro conocimiento como la Cabernet Franc o la Prieto Picudo. Parafraseando el título de la película dirigida por John Schlesinger a principios de los noventa: "De repente, unos extraños..."


Sala de catas ampliada en Tomevinos


Vista cenital de la tienda desde la sala de catas



Detallamos a continuación las características de cada vino catado, su procedencia y las notas de cata, incluyendo también alguna información del cultivo de cada cepaje.

HÉCULA 2012
DO. Yecla. Bodegas Castaño (Murcia)
100% Monastrell. 6 meses de barrica de roble. Cultivo en vaso semienterrado en suelos arenosos.
Rojo picota de capa media con ribete granate. Fruta roja muy madura en nariz, esperada fase nasal tratándose de una zona cálida como Murcia. Especias dulces y flores secas. Fondo alcohólico y marcada acidez. Elevada intensidad aromática. Astringencia presente, con recuerdo mineral de grafito. Alejado de nuestros gustos...


PETIT YLLANA 2012
DO. Ribera del Júcar. Bodegas Yllana (Cuenca)
100% Bobal. 4 meses de crianza.
De capa media-baja y ribete rosado. Algo corto en nariz. Aroma a posos de café, cenizas y ahumados, especialmente a copa parada. Marcada acidez y taninos imperceptibles. Fácil de beber. Muy corto postgusto licoroso (guindas al marrasquino). Agradable y sencillo. Para cualquier ocasión. Probablemente con largo recorrido en botella. Prometedor.


ESTAY 2013
VT. Castilla León. Bodegas Dominio Dostares (León)
100% Prieto Picudo. 6 meses de barrica de roble.
Variedad de uva autóctona de la provincia de León, de cultivo en vaso y con una peculiar técnica de poda que le confiere un porte rastrero. Casta no autorizada por el consejo regulador de la DO. Bierzo, de manera que los vinos elaborados con ella son comercializados como Vinos de la Tierra de Castilla León.
Color rojo picota de capa media-alta con menisco granate ligeramente violáceo. Abundante lágrima algo pigmentada. Frutas negras en nariz, especias dulces, regaliz y recuerdos lácteos. Paso fácil por boca. Astringencia media muy bien integrada. Todo un hallazgo. Sólo por descubrirlo, mereció la pena la cata. Nuestro favorito.



En el centro, las botellas de Estay 2013. Nuestro vino ganador en esta cata.



PÉTROLA 2012
DO. La Mancha. Bodegas De Alort (Ciudad Real)
100% Cabernet Franc. 6 meses de barrica de roble.
Variedad de uva originaria de Francia, más concretamente de la región de Burdeos, donde su cultivo en la actualidad ha sido prácticamente abandonado. Presente en muchas otras zonas vitícolas del mundo, es considerada la progenitora de la popular Cabernet Sauvignon.
Color rojo picota de capa alta y ribete rubí. Aromas a frutas negras, humedad y fondo cárnico, no del todo agradable. Muy potente en boca, con marcada astringencia. Incómodo y difícil. Falto de barrica, de botella o de ambas cosas...


ALJIBES 2011
VT. Castilla La Mancha. Bodega Finca Los Aljibes (Albacete)
100% Cabernet Franc. 12 meses de barrica de roble francés.
Picota de capa alta con menisco teja. Nariz rica en frutas negras y brotes de soja. Recuerdo a guindas en licor. Muy redondo y complejo. Equilibrado. Mucho mejor que el anterior, aún siendo la misma variedad de uva. Se agradece esa crianza en roble y el posterior redondeo en botella.


ALODIA UNO MORISTEL 2010
DO. Somontano. Bodegas Alodia (Huesca)
100% Moristel. 4 meses de barrica de roble.
Uva autóctona del la comarca oscense del Somontano, ahora en recuperación, de difícil manejo enológico, ya que exige cortas crianzas en barrica y además evoluciona muy deprisa en botella.
De color cereza de capa media-baja con ribete color ladrillo, bastante evolucionado. Muy licoroso. Aromas de vainilla y canela envolviendo recuerdos florales a violetas. Bastante ácido en boca. Postgusto corto con predominio de los terciarios. Quizás este 2010 haya visto superado su momento óptimo de consumo. A reconsiderar en sucesivas añadas.

Una cata enormemente didáctica y formativa, alejada de las uvas más habituales en nuestras copas, permitiéndonos ampliar los horizontes enológicos hacia otras tierras, otras bodegas y otras variedades de uva menos implantadas comercialmente, aunque igualmente interesantes y todavía pendientes de ser descubiertas, comprendidas y valoradas por nosotros.

Manos a la obra...





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